montura vaquera

Como su nombre indica es la silla que se ha utilizado en la faenas del campo por los vaqueros para trabajar con el ganado. En una montura distinguimos la propia montura o casco con su perilla y su concha, la almohadilla, la zalea, la baticola, los bastos, las acciones de estribo, el estribo, y la manta estribera.
La montura vaquera o albardón está constituida por una armadura a base de dos barras de hierro, una delante en forma de  V invertida con una abertura suficiente para que la montura se  aloje sobre la cruz del caballo y sus espaldas, y otro detrás, de forma arqueada para formar el fuste trasero. Estos dos hierros están unidos transversalmente por canutos de paja de centeno y cosidos entre si. A su vez, éstos y la concha están forrados por piel de vaca, que se remoja para darle forma y se cose  sobre los canutos y la concha. Una vez seca esta piel, constituye un verdadero armazón que luego se forra con piel de ternera. La parte interior de la concha se forra con piel de cerdo.
Los bastos o bastes de la montura son unas almohadillas de lienzo y badana (témpano) rellenos de crin de caballo y pelos de cabra (pelote) que se encuentran cosidos a la montura y se asientan sobre el lomo del caballo para evitar rozaduras y mataduras.
En la parte delantera de la montura a cada lado surgen de  esta badana una argolla donde se fija el pecho petral. La perilla forma el borren delantero y la concha el trasero. Ambos pueden ir decorados en cuero  liso o en moteado. También se moteaban en  seda pero ha quedado ya en desuso.